El pasado miércoles en Saber Vivir, tuvimos la oportunidad
de hablaros de las infiltraciones que usamos en nuestra consulta para tratar
diferentes problemas del sistema locomotor.
Muchos de vosotros manifestáis vuestros temores cuando os proponemos un tratamiento de este tipo, bien por miedo a las agujas, bien porque no habéis recibido la información adecuada al respecto de cómo estas infiltraciones pueden mejorar el pronóstico de vuestras lesiones y recuperaciones quirúrgicas.
Por eso, hemos creído conveniente aclarar que no todas las infiltraciones son iguales, que no se emplean con los mismos fines y que tanto los principios activos como la técnicas que se emplea para aplicarlos han evolucionado de tal manera, que las infiltraciones se han convertido en un excelente aliado de la práctica traumatológica.
Muchos de vosotros manifestáis vuestros temores cuando os proponemos un tratamiento de este tipo, bien por miedo a las agujas, bien porque no habéis recibido la información adecuada al respecto de cómo estas infiltraciones pueden mejorar el pronóstico de vuestras lesiones y recuperaciones quirúrgicas.
Por eso, hemos creído conveniente aclarar que no todas las infiltraciones son iguales, que no se emplean con los mismos fines y que tanto los principios activos como la técnicas que se emplea para aplicarlos han evolucionado de tal manera, que las infiltraciones se han convertido en un excelente aliado de la práctica traumatológica.