De izda a dcha: Dres. Villamor, Bouffard y Jiménez Díaz |
Esta entrada empieza en realidad en 1995, año en el que,
acabando la especialidad de Traumatología en Barcelona, me trasladé a Pamplona
para cursar, en la Clínica Universitaria de Navarra, un máster en microcirugía.
Quería adquirir destreza en la sutura y reparación de vasos sanguíneos y
nervios, además de desenvolverme con soltura en localizaciones que
tradicionalmente nos asustaban a los traumatólogos.
Sabía que así podría ser capaz de abordar lesiones y trabajar en áreas que las escuelas clásicas de Traumatología evitaban, un factor que sin duda complicaba muchas intervenciones.
Sabía que así podría ser capaz de abordar lesiones y trabajar en áreas que las escuelas clásicas de Traumatología evitaban, un factor que sin duda complicaba muchas intervenciones.
Siempre he tenido inquietud por cuestionar viejas
limitaciones, así que cuando acabé la especialidad (ya estamos en 2000) me
desplacé a Chicago para conocer una nueva tendencia quirúrgica focalizada en la
búsqueda de abordajes quirúrgicos mínimamente agresivos destinados
principalmente a la colocación de prótesis de rodilla y cadera.
También en ese momento me encontré con algunos cirujanos que
cuestionaban aún esas técnicas, aunque he de decir que en iQtra nos han
ayudado, cuando menos, a repasar la anatomía y a revisar sus principios
funcionales a la hora de enfrentarnos a una estructura articular. Gracias a
esta inquietud hemos podido desmenuzar los abordajes establecidos por nuestros
maestros para implantar gestos justificados y conscientes que ahorran lesión,
dolores, tiempo de recuperación y secuelas a nuestros pacientes.
Y siguiendo este espíritu curioso he seguido durante toda mi
carrera, lo que sin duda me ha llevado a un curso en el que he participado este
fin de semana. Se trata de un curso de ecografía musculoesquelética que
certifica la formación de experto en anatomía ecográfica.
Los organizadores, el Doctor Fernando Jiménez Díaz ,
director de la escuela de ecografía musculoesquelética de la Federación Española
de Medicina Deportiva (FEMEDE) y el profesor Antonio Bouffard, especialista en
radiología diagnóstica del Detroit Medical Center, nos han dado una lección de ecografía
aplicada al sistema musculoesquelético de una calidad docente excepcional.
La ecografía es una técnica de imagen diagnóstica que nunca
ha sido ni valorada ni suficientemente aprovechada por los traumatólogos, médicos
deportivos, reumatólogos, urgenciólogos o cualquier especialidad dedicada al
tratamiento del aparato musculoesquelético.
Seguramente se trate de la técnica diagnóstica mas
dependiente del especialista que la realiza. Esto significa que el resultado de
la prueba depende en gran medida de la experiencia del ecografista, de su
conocimiento de anatomía, de su intención al explorar al paciente y de su arte
al hacerlo. Por ello siempre nos ha costado mucho solicitar una ecografía diagnóstica
si el ecografista encargado de llevarla
a cabo no se trataba de un experto de total confianza y un colaborador
estrecho.
Desde hace algunos años, en iQtra hemos comenzado a asistir
a cursos y a visitar a expertos en esta área y hemos ido descubriendo que la
ecografía es una prueba de imagen capaz de darnos información a veces mucho más
valiosa que la que nos ofrece la resonancia magnética.
De hecho, tal y como os comentamos en la entrada Aplicaciones de la ecografía más allá del diagnóstico, en iQtra llevamos bastante tiempo manejando el ecógrafo
en nuestra actividad de consulta diaria; hasta el punto de que no sólo nos
sirve para ver, sino también para tratar. Así lo hacemos para guiarnos en
infiltraciones (tal y como explicamos en el vídeo sobre calcificaciones en elmanguito rotador del hombro), en la aplicación del plasma rico en factores decrecimiento o en las evacuaciones de hematomas de las roturas musculares.
La ecografía no sólo nos permite ser más certeros en las
infiltraciones. Además, podemos resolver calcificaciones tendinosas de hombro
que hace unos años únicamente podíamos tratar con cirugía artroscópica. Ahora
en consulta, con anestesia local muchas de ellas quedan solucionadas.
También nos llevamos a quirófano el ecógrafo y realizamos
distintas cirugías guiadas por ecografía con lo que hemos reducido
drásticamente la agresividad en muchas de las maniobras quirúrgicas, algunas de
las cuales podemos hacer con una aguja gracias a la precisión que nos otorga la
ecografía.
No me cabe dudad de que cursos como este pronto serán
obligatorios en la formación de especialistas de todas las disciplinas
aplicadas al sistema musculoesquelético. Entretanto, la investigación científica
y docente de grupos como los de el Dr. Jiménez Díaz y Antonio Bouffard están
siendo incuestionables avances del futuro más inmediato.
También te puede interesar:
- Aplicaciones de la ecografía más allá del diagnóstico.
- Eliminar calcificaciones del manguito rotador. En iQtra es posible
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