lunes, 28 de diciembre de 2009

Disfruta del esquí sin riesgos

Hemos dejado atrás Nochebuena y Navidad, pero no han terminado los festejos de estas fechas. De esta manera, y después de cumplir con la familia, son muchos los que despiden el año presente o le dan la bienvenida al que viene cogiendo unos días de vacaciones y haciendo deportes de invierno; sobre todo el esquí, una actividad cada vez más accesible.


Quizá por esta circunstancia e, indudablemente, por el hecho de que son muchos los que se ‘calzan’ las tablas únicamente en este tiempo aunque el resto del año llevan a cabo una vida sedentaria, los traumatólogos atendemos cada vez más lesiones relacionadas con este deporte, sobre todo en la mano y en la rodilla.


Preparación física

Es evidente que cuanto más en forma estemos más disfrutaremos y menos accidentes sufriremos. Con la mayor antelación posible, y al menos un mes antes de iniciar la temporada de nieve, es conveniente hacernos con una tabla de ejercicios de cuádriceps (cara anterior del muslo) que puede consistir en 30 minutos de ejercicios como bicicleta suave, caminatas, escaleras, carrera continua o sentadillas. 


También es interesante potenciar abdominales y lumbares. Bastan 5 o 10 minutos diarios. Se puede completar con estiramientos articulares, de cuádriceps y de gemelos.
Calentamiento

A estos ejercicios deberíamos sumar la repetición de los estiramientos en pista, antes de comenzar cada jornada, para calentar los músculos, tendones y ligamentos. Así lograremos que toda la estructura musculotendinosa sea más elástica y menos proclive a la rotura.
Esta pauta tendría que repetirse una vez terminada la jornada alpina para evitar despertarnos a la mañana siguiente con los músculos contracturados.


Ropa y equipamiento

Puede parecer obvio, pero a pesar de las indicaciones para abrigarse adecuadamente, el personal sanitario de las estaciones de esquí sigue atendiendo muchas congelaciones. Éstas, cuando menos, tienen una repercusión estética negativa, ya que afean las zonas visibles de cara, manos y orejas. 

El primer síntoma de una congelación es la anestesia de la zona, por lo que es fácil que lleguemos a sufrir una lesión de este tipo si no ponemos atención y cuidado en los primeros momentos en los que el frío o el aire sean intensos. 


Es fundamental llevar siempre un segundo par de guantes, no solo por si perdemos sino también por si se mojan. La misma atención hay que procurársela a la protección de las orejas por ser éstas más sensibles a las bajas temperaturas y al viento.


No te olvides

La protección solar es esencial en alta montaña. Da igual que no luzca el sol. Los rayos ultravioleta traspasan las nubes y sus efectos nocivos se multiplican si, además, sopla el viento. Asimismo, hay que cuidar la hidratación de la dermis porque la sequedad y el frío hacen que la piel sea más frágil.


Las gafas han de ser tus fieles acompañantes. Busca lentes homologadas si no quieres quedarte fuera de combate unos días y no te obsesiones con las marcas blancas de las gafas por muy antiestéticas que puedan parecerte.


Aparca las dietas de adelgazamiento si estás haciendo una. Patatas, pan, pasta y arroz constituyen una fuente de hidratos de carbono que te vendrá fenomenal para afrontar las jornadas deportivas con la suficiente energía.


No te creas eso de que el alcohol ‘mata el frío’. Estas bebidas desestabilizan nuestro sistema termorregulador, así que únicamente conseguiremos destemplarnos, reducir el rendimiento y aumentar el riesgo de caídas. En su lugar procura hidratarte con bebidas isotónicas cada 20 o 30 minutos.


No apures tus fuerzas. Si notas que el cansancio empieza a hacer mella en tu cuerpo baja el ritmo y ve frenando gradualmente. La última hora del día es la más peligrosa en lo referente a las lesiones. Los tendones de las rodillas han soportado mucha tensión y son más proclives a romperse.


No quiero despedirme sin desearos la mejor de las temporadas blancas y todo lo mejor no sólo para los días festivos que nos quedan aún, sino para todo el año 2010, en el que seguiremos en contacto a través de este blog.
Un abrazo

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