Hola a todos.
Esta semana he atendido las llamadas de varios medios de comunicación al respecto de una lesión que afecta al piloto australiano Casey Stoner y de la que ya hemos hablado en este blog.
Se trata del síndrome compartimental, una dolencia que vemos en muchos pilotos de motociclismo y que intervenimos con bastante frecuencia sin mayores complicaciones.
Como ya explicaba en la entrada a la que os hago referencia y he vuelto a exponer en estos días cuando me han llamado, el síndrome compartimental no es otra cosa que el estrangulamiento de los vasos sanguíneos del antebrazo cuando la fascia muscular que envuelve las fibras no da de sí lo suficiente para dar cabida a un músculo que se dilata y se tensa en exceso debido a los esfuerzos repetitivos que se requieren a la hora de sujetar la motocicleta por el manillar y tener que forzar la postura de los dedos al manejar la maneta.
Reducción progresiva de la fuerza en la mano y el antebrazo, pérdida de sensibilidad, tensión muscular, acorchamiento... son los síntomas que refieren los pilotos que sufren este problema. De hecho, no es raro verlos agitar la mano y soltar la maneta para tratar de eliminar esa sensación de entumecimiento que tanto molesta y que tanto obstaculiza el desarrollo de un buen pilotaje.
Según parece, Stoner (y no es el único) es reacio a pasar por el quirófano, quizá porque teme que eso le impida terminar la brillante temporada que está llevando a cabo.
Según nuestra experiencia, mejor operar
Sin embargo, la experiencia acumulada en iQtra después de muchos años tratando las lesiones más frecuentes de los pilotos de motos, incluyendo por supuesto el síndrome compartimental, nos indican que la intervención es la única salida posible.
La fisioterapia y los estiramientos alivian temporalmente, pero no erradican el problema de forma definitiva, de manera que cuando un piloto acude a nosotros y observamos que ha comenzado a desarrollar los síntomas de esta dolencia aconsejamos intervenir cuanto antes para que los pilotos puedan volver a la pista sin molestias.
También aclaraba en la entrada anterior e insisto ahora en que la intervención es sencilla y mínimamente invasiva. Se trata básicamente de liberar la musculatura oprimida para que el oxígeno transportado en la sangre llegue con facilidad a todos los tejidos. Esta liberación se hace mediante incisiones en la vaina que envuelve las fibras musculares.
Éstas se recolocan por sí mismas con extraordinaria facilidad y nuestros fisioterapeutas contribuyen a acelerar este proceso realizando ejercicios de estiramiento para eliminar las rigideces musculares, así como vendajes específicos que sirven para drenar la zona de líquidos y descongestionarla cuanto antes.
En definitiva, el piloto puede reincorporarse a los entrenamientos en una semana. Por todas estas razones, Stoner no debería eludir el quirófano porque precisamente pasando por él podrá concluir una temporada cuajada de éxitos.
Es la misma recomendación que damos a todos los pilotos, escaladores, marchadores y corredores que venís a iQtra con las mismas molestias.
miércoles, 9 de mayo de 2012
Síndrome compartimental, quirófano seguro y eficaz
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